tomado de la pag web:
http://salud.doctissimo.es/enciclopedia-medica/enfermedades-psicologicas-y-psicosomaticas/esquizofrenia.html
Causas
Todavía no se conocen con precisión, pero su origen biológico es incuestionable. Según hipótesis recientes, una anomalía en el desarrollo del cerebro explicaría las disfunciones del pensamiento: algunas capacidades, indispensables para la adaptación del individuo a su entorno y a los de más, sólo se instauran en la adolescencia, ya que requieren la maduración del cerebro. En el esquizofrénico, esta maduración no se produce.
Síntomas
El diagnóstico de esquizofrenia se establece mediante el hallazgo de tres síntomas característicos:
Desorganización de las actividades mentales. Afecta a las funciones intelectuales: falta de lógica, mala utilización de las palabras y de la sintaxis, incapacidad para tomar parte en una conversación y para intercambiar ideas. Todo ello hace difícil la comunicación con el esquizofrénico. Los estados emocionales también están afectados: el paciente es capaz de expresar al mismo tiempo sentimientos totalmente opuestos, como amor y odio, por ejemplo, «quiero a mi madre y la detesto».
Actividad delirante. El enfermo dice mentiras en las cuales cree firmemente. Éstas se ven influidas por alucinaciones (oye voces), interpretaciones (interpreta los acontecimientos reales de forma errónea, a causa de su delirio) o imaginaciones (se inventa una historia).
Signos de aislamiento. El paciente parece apartado del mundo.
No tiene ganas de tratar con los demás. En algunos casos, no experimenta emociones, ni positivas ni negativas. Normalmente, estos signos de aislamiento aparecen después de las manifestaciones de desorganización y de delirio.
La intensidad de todos estos síntomas varía según las personas.
El paciente aparece, a menudo, como una persona rara, cerrada e impenetrable.
Desorganización de las actividades mentales. Afecta a las funciones intelectuales: falta de lógica, mala utilización de las palabras y de la sintaxis, incapacidad para tomar parte en una conversación y para intercambiar ideas. Todo ello hace difícil la comunicación con el esquizofrénico. Los estados emocionales también están afectados: el paciente es capaz de expresar al mismo tiempo sentimientos totalmente opuestos, como amor y odio, por ejemplo, «quiero a mi madre y la detesto».
Actividad delirante. El enfermo dice mentiras en las cuales cree firmemente. Éstas se ven influidas por alucinaciones (oye voces), interpretaciones (interpreta los acontecimientos reales de forma errónea, a causa de su delirio) o imaginaciones (se inventa una historia).
Signos de aislamiento. El paciente parece apartado del mundo.
No tiene ganas de tratar con los demás. En algunos casos, no experimenta emociones, ni positivas ni negativas. Normalmente, estos signos de aislamiento aparecen después de las manifestaciones de desorganización y de delirio.
La intensidad de todos estos síntomas varía según las personas.
El paciente aparece, a menudo, como una persona rara, cerrada e impenetrable.
Evolución
Puede ser grave. Los signos de aislamiento suelen dominar la enfermedad y el esquizofrénico parece separarse del mundo. El entorno no lo motiva ni lo ayuda a reaccionar. Su comportamiento se vuelve estereotipado: movimientos de balanceo que se repiten incansablemente y rituales gestuales que alteran su comportamiento.
El síntoma más importante, en algunos casos, es la desorganización de las actividades mentales. El paciente está aislado en un mundo de incomprensión. Cuando domina el delirio, el esquizofrénico da la impresión de haberse escapado del mundo real para entrar en un universo cuyo acceso está prohibido a los demás.
Afortunadamente, la enfermedad no siempre evoluciona de este modo. Parece demostrado que alrededor del 25 % de las personas afectadas por es te trastorno evolucionan favorablemente.
El síntoma más importante, en algunos casos, es la desorganización de las actividades mentales. El paciente está aislado en un mundo de incomprensión. Cuando domina el delirio, el esquizofrénico da la impresión de haberse escapado del mundo real para entrar en un universo cuyo acceso está prohibido a los demás.
Afortunadamente, la enfermedad no siempre evoluciona de este modo. Parece demostrado que alrededor del 25 % de las personas afectadas por es te trastorno evolucionan favorablemente.
Para entenderlo mejor
Algunos términos que hay que conocer:
Desdoblamiento de la personalidad. Este término se utiliza inapropiadamente para designar la esquizofrenia. En lenguaje corriente, suele calificar el sentimiento de estar fuera de sí, de no reconocerse; este sentimiento puede observarse durante las crisis de angustia o en los estados depresivos.
Estereotipia. Acción, generalmente elemental (p. ej., balanceo del cuerpo), que se repite sin un objetivo claro.
Desdoblamiento de la personalidad. Este término se utiliza inapropiadamente para designar la esquizofrenia. En lenguaje corriente, suele calificar el sentimiento de estar fuera de sí, de no reconocerse; este sentimiento puede observarse durante las crisis de angustia o en los estados depresivos.
Estereotipia. Acción, generalmente elemental (p. ej., balanceo del cuerpo), que se repite sin un objetivo claro.
Tratamiento
Deben realizarse múltiples intervenciones para atender a un paciente esquizofrénico. El tratamiento con medicamentos es necesario para actuar sobre los síntomas de la enfermedad. Sin ellos, no suele ser posible ninguna otra acción.
También es preciso establecer ayuda psicológica para el paciente y su familia, y desarrollar una estrategia de re inserción.
También es preciso establecer ayuda psicológica para el paciente y su familia, y desarrollar una estrategia de re inserción.
Tratamiento farmacológico
El tratamiento farmacológico consiste en la administración de los medicamentos llamados neurolépticos. Estas sustancias son muy activas sobre los signos de la enfermedad, especialmente sobre la desorganización y el delirio. Existe un gran número de neurolépticos y la elección depende de su eficacia y de los efectos secundarios que pueda causar en el paciente.
El tratamiento farmacológico dura varios años y requiere la cooperación del paciente.
El tratamiento farmacológico dura varios años y requiere la cooperación del paciente.
Tratamiento psicosocial
La calidad de la relación entre el médico y el paciente es un elemento fundamental en el tratamiento de la enfermedad.
Es importante que el paciente tenga confianza (actitudes de apoyo, de refuerzo, de explicación y de consejos) para poder admitir que está enfermo y aceptar un tratamiento.
Ayudas psicoterapéuticas. Son esenciales, pero han de tener en cuenta las posibilidades reales del paciente para obtener el máximo de beneficios. Su objetivo es intervenir en el comportamiento, con el fin de ayudar al enfermo a establecer estrategias de pensamiento o de acción adaptadas al mundo exterior.
Apoyo familiar. Es muy importante en la evolución de la enfermedad: un medio familiar abierto y tolerante siempre resulta beneficioso en este sentido. Sin embargo, a menudo, las familias de esquizofrénicos tienen grandes dificultades para enfrentarse a este tipo de problema. La angustia, nacida de la incomprensión de la enfermedad y del sentimiento de impotencia mezclado con culpabilidad, da lugar a actitudes de rechazo, hostilidad o humillación por parte de la familia. También es posible que
ocurra lo contrario: la familia puede negar la gravedad de las dificultades y amparar y sobreproteger al paciente, lo que le impide utilizar su capacidad de autonomía.
Para ayudar a las familias a enfrentarse con este tipo de problemas, se han creado numerosas asociaciones de padres de pacientes afectados de esquizofrenia. Éstas les ofrecen la comprensión y el apoyo indispensables para reaccionar ante el trastorno e intervenir de forma apropiada, sin abandonar al paciente.
Medidas de reinserción social. Completan el dispositivo terapéutico y se eligen en función de las capacidades del paciente.
Son un factor de estabilización y de lucha contra el aislamiento de la sociedad. Permiten movilizar los recursos del paciente. Pueden valorarse varias alternativas: desarrollar trabajos ocupacionales en una institución para enfermos crónicos o retomar una actividad profesional en un medio ordinario o en un medio protegido (centros de reinserción laboral).
Es importante que el paciente tenga confianza (actitudes de apoyo, de refuerzo, de explicación y de consejos) para poder admitir que está enfermo y aceptar un tratamiento.
Ayudas psicoterapéuticas. Son esenciales, pero han de tener en cuenta las posibilidades reales del paciente para obtener el máximo de beneficios. Su objetivo es intervenir en el comportamiento, con el fin de ayudar al enfermo a establecer estrategias de pensamiento o de acción adaptadas al mundo exterior.
Apoyo familiar. Es muy importante en la evolución de la enfermedad: un medio familiar abierto y tolerante siempre resulta beneficioso en este sentido. Sin embargo, a menudo, las familias de esquizofrénicos tienen grandes dificultades para enfrentarse a este tipo de problema. La angustia, nacida de la incomprensión de la enfermedad y del sentimiento de impotencia mezclado con culpabilidad, da lugar a actitudes de rechazo, hostilidad o humillación por parte de la familia. También es posible que
ocurra lo contrario: la familia puede negar la gravedad de las dificultades y amparar y sobreproteger al paciente, lo que le impide utilizar su capacidad de autonomía.
Para ayudar a las familias a enfrentarse con este tipo de problemas, se han creado numerosas asociaciones de padres de pacientes afectados de esquizofrenia. Éstas les ofrecen la comprensión y el apoyo indispensables para reaccionar ante el trastorno e intervenir de forma apropiada, sin abandonar al paciente.
Medidas de reinserción social. Completan el dispositivo terapéutico y se eligen en función de las capacidades del paciente.
Son un factor de estabilización y de lucha contra el aislamiento de la sociedad. Permiten movilizar los recursos del paciente. Pueden valorarse varias alternativas: desarrollar trabajos ocupacionales en una institución para enfermos crónicos o retomar una actividad profesional en un medio ordinario o en un medio protegido (centros de reinserción laboral).